soy el olvido más reciente de una mujer que no puedo olvidar
la liturgia
de un rapto de vida a la cual me suscribo loco y marginado
repitiendo su nombre
inconsciente de saber que si tomo una fotografía
y la habito con mis ojos
aparecerá
en una carta inmemorable
chispeando este pastizal de nervios
será eso
o debilitando seguir
como si nunca aprendiera a desenredar en mi cabeza
la maraña de un “ella’
viernes, 30 de septiembre de 2011
lunes, 26 de septiembre de 2011
la causa divina
yo pensaba que la noche se iba sola
pero cuando te vi acercarte
luminosa como un sol
entendí la voluntad de la creación
vi a dios dorando tus cabellos
cuestionándose el amor de los hombres
dejando el universo sin terminar
para ponerte sobre la tierra
y contemplarte
pero cuando te vi acercarte
luminosa como un sol
entendí la voluntad de la creación
vi a dios dorando tus cabellos
cuestionándose el amor de los hombres
dejando el universo sin terminar
para ponerte sobre la tierra
y contemplarte
viernes, 2 de septiembre de 2011
composición atardecida
adentro es puro el tapiz que ha plasmado la rosa reflejada en un pequeño florero
en la calle se van apagando, poco a poco, los motores del día
permanecer en la quietud de lo cotidiano ya no parece una opción posible
sin embargo
hay un color en el cielo que permanece inmutable ante las imposibilidades propias del tiempo
y en el atardecer me dosifico la luna como un remedio contra la noche que avanza
no quiero este silencio si no es otra cosa más que una marea que te trae de vuelta
no quiero reconocer los lugares donde estuviste aunque estos sean partes de mi cuerpo
la noche se fragmenta en estaciones para andar
y acá abajo hay un hombre perdido que mide tu ausencia en segundos.
en la calle se van apagando, poco a poco, los motores del día
permanecer en la quietud de lo cotidiano ya no parece una opción posible
sin embargo
hay un color en el cielo que permanece inmutable ante las imposibilidades propias del tiempo
y en el atardecer me dosifico la luna como un remedio contra la noche que avanza
no quiero este silencio si no es otra cosa más que una marea que te trae de vuelta
no quiero reconocer los lugares donde estuviste aunque estos sean partes de mi cuerpo
la noche se fragmenta en estaciones para andar
y acá abajo hay un hombre perdido que mide tu ausencia en segundos.
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